domingo, 6 de septiembre de 2015

Trasteando bajo la lluvia (¡pobrecita Fibi!)



            ¡Pobrecita Fibi!
Menudo asco de día. Me refiero al tiempo,  lloviznando a intervalos pero sin tregua desde ayer. He mirado la predicción en AEMET y parece que la cosa no va a mejorar en toda la semana.
Mi perrita ha desarrollado una curiosa fobia a la lluvia en estos dos últimos años. De hecho, aunque tenga las persianas bajadas, sé que está lloviendo  por su comportamiento: me busca, se me sube encima, llora, se esconde… y me cuesta dios y ayuda sacarla a la calle y que haga sus necesidades. Se tira horas girando sobre sí misma antes de decidirse a hacer nada, y luego vuelve a casa a la velocidad del rayo.
Supongo que le afecta más la humedad desde que la operaron de la hernia de disco, o quizá sea simplemente que está mayor (va a cumplir once años)… o puede que sólo se trate de una perrita maniática (a quién se parecerá).
Rescaté a Fibi de una protectora de animales cuando sólo tenía seis meses. La habían abandonado ya en dos ocasiones y, al parecer, el dueño anterior la maltrataba. No entiendo cómo la gente puede llegar a ser tan miserable, tan ruin y cruel. Fibi estaba encerrada con los perros grandes, pues decían que los pequeños le daban miedo. En cuanto la ví, supe que se vendría a casa conmigo. Lo supe con certeza absoluta, fue amor a primera vista.
Hemos pasado mucho juntas, muchísimo, malo y bueno. Y aunque a veces me quejo de que no me hace el caso que quisiera, es una gran compañera. En los momentos más difíciles de mi vida su amor incondicional ha sido un alivio para mí.
Puede que no sea la mejor ama del mundo, hay muchas cosas que podría hacer mejor, pero dudo que Fibi pudiera haber encontrado a alguien que la quiera y la cuide tanto como yo.








Fibi, este año. Tiene los ojos más bonitos que he visto, y reflejan su nobleza y su dulzura.

Como mi gordi no quiere salir (y yo tampoco, lo reconozco) me he dedicado en cuerpo y alma al blog. He pasado horas (ayer me olvidé de cenar) trasteando todo lo que he podido, insertando gifts animados, contadores de visitas, diferentes gadgets, que varían entre lo útil y lo absurdo, y me lo he pasado en grande. Me encantaría saber algo más de informática, porque aunque Toñi se empeña en decir que soy “un cerebrito” yo me veo bastante limitada. A ver, no es que no sepa hacer la “o” con un canuto, es que hay cosas a las que no llego. Por ejemplo, me frustra no poder poner como fondo del blog la imagen que yo quiero. La que tengo ahora no está mal, pero he visto otras infinitamente más bonitas solo que, aunque se ajustan a mi idea para la página, no coinciden con la resolución requerida por Blogger.
Me he visto un montón de tutoriales para solucionar el problema pero no ha dado resultado y ahora ya me da pereza investigar más… aunque lo mismo mañana me vuelvo a poner.  Total, va a seguir lloviendo. ¡Pobrecita Fibi!

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