Cada mañana, antes de salir rumbo a
la escuela, Paula dejaba en el balcón de su casa un plato grande repleto de migas
de pan para los gorriones. En cuanto los oía piar salía para ponerles su
comida. Estaba muy orgullosa de los progresos que estaba realizando con ellos.
Al principio, se marchaban en cuanto ella se asomaba, pero ahora podía
permanecer en un rincón de la terraza y
las aves no se sentían intimidadas ante su presencia. Estaba convencida
de que los estaba domesticando y que acabarían por comer de su mano.
Un día escuchó un gran barullo que
provenía del árbol donde los gorriones tenían su nido. Trató de ver qué sucedía
pero no lo consiguió y al final se marchó a hacer los deberes, preocupada,
pensando que quizá un gato había trepado hasta una de las ramas… pero no podía
estar más equivocada. En realidad, los pájaros celebraban una fiesta: por fin,
después de mucho tiempo, habían conseguido amaestrar a un ser humano. Sólo
tenían que silbar para que ella saliera a ponerles la comida… ¡y eso había que
festejarlo!
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| Imagen de la red. Procederé a eliminarla del blog si el autor lo solicita |
Es curioso como de un mismo hecho se pueden extraer distintas interpretaciones, y ambas partes pensar que han amaestrado a la otra jaja. ¡Un saludo compañera!
ResponderEliminarY es cierto... por lo menos en mi caso, yo creo que la que obedece órdenes soy yo, pero mira que lo hago con gusto. Un beso enorme, compi, gracias por tu comentario
Eliminar¡Increíble! Que giro en la historia tan majestuoso jeje. Por algo siempre estoy tentada a leerte, siéntete orgullosa (? jajaja.
ResponderEliminarSaludos calurosos <3
Me alegra que te haya gustado, y claro que me siento orgullosa, cada comentario me sube la moral y me anima. ¡¡Un gran beso, Ross, y gracias por ser parte de este mundo mío!!
EliminarQué sabios los pajaritos, consiguieron lo que muchos humanos no pueden ;-)
ResponderEliminarMuy imaginativo tu relato, Chari, ¡me ha gustado mucho!
Besos
Muy sabios, y no es tan imaginativo... mis gorriones me tienen amaestrada, en cuanto silban me tienen echándoles pan... lo que dan de sí mis pajaritos!!! Un beso, Chelo, me alegra que te haya gustado
EliminarCoincido con José Carlos, este micro nos lleva a reflexionar acerca de muchas cosas, como por ejemplo que cuando sembramos luego recogemos, lo cual forma parte una de las siete leyes del universo: La Ley de Causa y Efecto.
ResponderEliminarNos encantó leerla, querida amiga Chari!!!
Muchos besos y ¡feliz lunes!
Es cierto, es una ley universal que se podría aplicar muy bien al relato. Me alegra que te haya gustado, un beso enorme y mil gracias por el comentario.
EliminarFeliz lunes
Lo que un toque agradable para una historia! Las aves son la celebración de una fiesta porque habían logrado domar un humano! Tienen una agradable tarde de lunes y la tarde, Chari. Besos!
ResponderEliminarSí, a veces nos pensamos que somos los más listos y nos ganan por la mano, jajaja. Gracias por venir, Paula, y por tu amable comentario. Mil besos
EliminarEsto es cierto. Yo disfrutamos de la historia mucho y gracias, querido amiga Chari, para compartir. Hay también muchas veces me he sentado solo en el bosque simplemente para relajarse y después de un tiempo van a llenar un árbol cercano a mí y cantar. A veces, un centenar, este año parece que ser el los cuervo adoptado me, y que se perca en las ramas más bajas, y caw en el mí. Yo caw de nuevo a ellos. Eso podría seguir durante horas si no me dejo.
ResponderEliminar¡¡¡Qué maravilla, vivir cerca de un bosque!!! Ese era mi sueño de pequeñita, luego me hice más comodona y ahora vivo en la playa :) ¡¡Cómo cambiamos, ¿verdad? Me alegra que tengas esos momentos de relax, y los pájaros son la mejor compañía. Un beso enorme, Cindy, feliz día
EliminarLa cosa va de pajaritos últimamente ;)
ResponderEliminar¡¡¡Es que los echaba mucho de menos!!! Me encanta tenerlos cerca, y me hace feliz ocuparme de ellos... y que me amaestren, como en el cuento. Un beso, feliz lunes
EliminarPrecioso chari me ha encantado el giro que da el relato muy bueno
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado, Pedro, el final me resultó divertido de escribir, es diferente. Mil gracias por visitarme y por tu comentario, que tengas una feliz tarde de lunes
EliminarGenial relato. Me han encantado los dos puntos de vista.
ResponderEliminarUn besillo.
¡¡Me alegra que te haya gustado, María!! Y créeme, el punto de vista de los pájaros es el real, jajaja. Un beso enorme
EliminarQué manera de narrar y convertir algo tan cotidiano en extraño. Me gustó.
ResponderEliminarQué bien que te haya gustado, me encanta encontrar la magia en las cosas cotidianas y mis pajaritos dan para mucho, son un amor. Feliz tarde, María E
EliminarUn microrelato genial, mi felicitación querida Chari.
ResponderEliminarFeliz comienzo de semana.
Abrazo.
Muchísimas gracias, Carmen, me alegra que te haya gustado. Que tengas también una fantástica semana. Un gran beso
EliminarMe encanta y requeteencanta!!!! De verdad que es un relato genial, menudo giro le has dado a la historia.
ResponderEliminarUn besito.
¡¡¡Requetegracias!!! Sí, un giro que es casi tan real como la historia en sí, los gorriones me tienen amaestrada a mi, lo veo a diario. Silban y me tienen delante. Menudo "pico" tienen, jajaja. Un beso, Gema, gracias por tu comentario
EliminarLa mía de mi plato no, pero siempre se lleva el mejor trocito, jajaja, así que estamos en las mismas. ¡¡Un beso enorme, Julio David! Gracias por visitar mi blog y por tus comentarios
ResponderEliminarMuy buen relato.Y una enseñanza para la humildad de cada cual: nuestro punto de vista, es sólo nuestro punto de vista. Después están todos los demás que pueden ser igual de válidos. Me gustaría conoce el del gato. Un beso.
ResponderEliminarJajaja, sí, el punto de vista del gato terminaría de redondear el relato, no lo había pensado... jajaja, lo mismo lo añado. Gracias por tu visita y por el comentario. Mil besos y que tengas una genial semana
EliminarGran relato Chary. Muy pero muy buena la anécdota.
ResponderEliminarUn abrazo grande.
Gracias, Gildardo, me alegra que te haya gustado. Por supuesto, tiene mucho de real... solo que mi protagonista es una niña en vez de una mujer de 50 años, jejeje. Un besito, amigo
EliminarLos gorriones te inspiran, Chari. Una historia muy bien narrada, sobre todo porque se siente como si lo estuviese contando todo la misma niña que lo vive. Y el giro final es magnífico. Me ha encantado, y da para pensar ;)!
ResponderEliminarUn beso grande y muy buen comienzo de semana!
Fer
Gracias, Fer, es que tengo el alma muy joven (el resto no, jejeje) y por eso me gusta meterme en la piel de una niña para contar mis experiencias.
EliminarMuchas gracias por tu comentario, un beso enorme y que tengas una semana fabulosa
Madre mía Chari!! Para mi este relato aparte de divertido, contiene cierto mensaje en el final de la historia, que la especie animal no está tan poco evolucionada como se cree el hombre.
ResponderEliminarHa sido genial, he vivido cada vuelo de los pajaritos, y al final me he reído jajajajajaajajaj.
Besos.
¡¡Me alegra que te haya gustado y te haya hecho reír, Mila!! A mi me encantó escribirlo, es muy de mi estilo. Y fue divertido ponerse en la piel de una niña, de la niña que fui. Un gran beso y feliz semana
EliminarPaula y yo votamos también por conocer el punto de vista del gato. Nos ha encantado !!!
ResponderEliminarJejeje, lo del gato es una gran idea de Rosa, me la apunto para la próxima. Un beso enorme a las dos!!!!!!!
Eliminar¿Y quién domesticó a quién en "El Principito"? Es genial leerte.
ResponderEliminar¡¡Es verdad!! Gracias por pasarte, Macarena, me alegra tu visita y tu comentario. Un beso enorme
EliminarMuy bueno! Tendemos a pensar que nuestro punto de vista es el correcto y puede que estemos equivocados....
ResponderEliminarUn beso, Chari, impactada me has dejado con esta historia.
Siempre hay dos versiones de todo, lo que pasa es que a veces nos obcecamos y creemos que estamos en lo cierto. Y metemos la pata. Me alegra que te haya gustado mi historia que tiene muchísimo de real. Un beso, Kirke y feliz martes
Eliminary porque será que este se me había pasado, esta muy bien y la verdad es maravilloso ese contacto con la naturaleza independientemente de quien domine a quien, el oir silbar y que acudan a comer y tú poderlos contemplar es una experiencia única y que ya quisiera yo para mi, es maravilloso que la naturaleza nos brinde estas oportunidades.
ResponderEliminarEs una auténtica delicia, y no me importa que me "domestiquen" porque me hace feliz verles en mi terraza, como la niña del cuento. Un beso enorme, Teresa.
EliminarBuenísimo el giro que las pegado. ;) Un besito, guapa. =)
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado, Soledad. Un beso enorme y mil gracias por pasarte :)
EliminarQué listos!!! Y la pobre Paula creyendo que los domesticaría, jeje
ResponderEliminarMuy bueno Chari, las dos caras de la historia.
Besos.
Nos creemos muy listos a veces, y mira, a mi mis gorriones me tienen "comiendo de su mano", jeje. Un besote, Irene, feliz día
EliminarAunque tu micro es cortito da mucho que pensar, Chari :))
ResponderEliminarNo me entretengo más porque llevo mucho retraso en la lectura, pero no quería dejar pasar la ocasión de decirte que me ha gustado mucho :)
Besitos de martes!!
Me alegra que te haya gustado, mis gorrioncitos me inspiran un montón. Un beso enorme, Julia, gracias por comentar siempre
EliminarQué lindo!! Los humanos vistos desde la perspectiva de los pájaros, y nosotros nos cremos que somos los seres superiores...Los gorriones tiene ese encanto campestre pero también de ciudad y son una especie abundante y tan común que es natural encontrárselos en cualquier lugar. Resulte precioso verles. Bellísima entrada que comparto.
ResponderEliminarUn beso
Los gorriones son pájaros Todo-terreno, se adaptan a todo. Son comunes, y puede que su plumaje no sea el más hermoso, pero a mi me dan vida cada día con su canto, sus saltitos y su alegría. Me tienen hechizada y "domesticada" como a la niña del cuento. Me alegra que te haya gustado el micro, Mercedes, y gracias por compartirlo. Un besote
EliminarMuy cierto. ¿Quién amaestra a quién? ¿Quién enamora a quién? ¿Quién seduce a quién? Siempre se ha dicho (los que tenemos animales de compañía) que no es la persona la que elige al animal, a la mascota, sino ésta que nos elige a nosotros, con su mirada, que nos atrae y enamora.
ResponderEliminarUn relato muy dulce, como un cuento son su metáfora. Me ha encantado la sencillez y calidad narrativa.
Un abrazo.
Me alegra que te haya gustado, Josep.
EliminarTienes razón, ellos nos eligen, mi perrita Fibi (la que sale en mi foto) me escogió, me miró con esos ojazos suyos y supe que sería mi compañera. Fue amor a primera vista.
Mil gracias por pasar y por tu precioso comentario. Besos, que tengas un buen fin de semana
Hola te leí x curiosidad ,que hermoso tu cuento y qué excelente para darle interpretación a situaciones de la vida.
ResponderEliminarMuy linda forma.
Gracias ,es un gusto leerte.
Bendiciones.
Gracias a ti, Caridad, por leer y por tu amable comentario. Me alegra tu visita a mi blog, espero verte por aquí. Un beso enorme y gracias de nuevo.
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