Nunca me han
dado miedo las cucarachas, ni asco. Si puedo, evito matarlas, me dan pena los
pobres bichos. Si puedo…
Escuché una
vocecilla aguda que me llamaba y me llevó mucho rato darme cuenta de dónde
provenía. No podía salir de mi asombro: ese animalejo me estaba hablando, y
pronunciaba mi nombre con claridad absoluta.
¿Creéis en la
reencarnación, y en el karma y todo eso? Ahora yo sí, fuerza mayor. Mi ex,
Marcos, el hombre que no supo luchar por mi amor, había fallecido y se había
reencarnado en el bichejo que tenía delante.
Me contó que
se había arruinado la vida, y había llevado consigo en su “descenso a los
infiernos” a su mujer (con la que había vuelto tras dejarme) y a su hijo. Que
había sido un desgraciado por culpa de su cobardía, que sentía el dolor que me
había causado su abandono. Quería expiar parte de sus pecados pidiéndome
perdón, instándome a que siguiera siendo la persona buena y generosa de la que
se había enamorado.
No pudo decir
mucho más. Dejé caer todo mi peso sobre la puñetera cucaracha. Vale, puede que
en mi próxima vida yo también me reencarne en insecto, pero lo que va delante
va delante.
Imagen de la red, la retiraré si el autor lo solicita
Este es el micro con el que participo en el concurso de relatos "SAN VALENTÍN II, La Cara Oculta", "El Círculo de escritores", de la comunidad Relatos Extraordinarios. ¡¡Espero que os haya gustado!! Feliz fin de semana de San Valentín para todos.
Un poco bestia para el ficticio ex, pero corto interesante y ¿habra una continuación de la encarnación de el/la protagonista? Estaria bien.
ResponderEliminarHola, Nicolás, gracias por la visita y el comentario. Si que es un poco bestia para el "ex", por suerte (para él) es ficción y me he permitido la licencia poética de liquidarlo y, además, con saña. Ahhh, qué a gustito me he quedado, jajaja. Me pensaré lo de la segunda parte, pero no se me ocurre un bichejo más asqueroso en el que reencarnarle. En cuanto a la prota, ella se reencarnará en algo precioso ¡¡seguro!!
EliminarUn beso, Nicolás
Comprendo que a veces hay que hacer excepciones... y esta cuqui, como las llamamos en casa, merecía serlo. ¡Yo también la hubiera aplastado con saña! jajajaja.
ResponderEliminarUn relato muy divertido, Chari. Hay demasiadas cucarachas y total, una menos... :P
Besitos de finde y mucha suerte en el concurso!!
Tú sí que me entiendes, Julia, jajaja. ¿Quién iba a notar la ausencia de una cuqui? Yo, desde luego, no, jajaja.
EliminarUn beso enorme, feliz finde
Ayyyyyy me encanta!!!!! Además es el único bicho de la tierra que me da cosa, he visto pocas y no he matado ninguna pero me dan una grima...y mira que me chiflan los animales, insectos y seres vivos en general.
ResponderEliminarUn besín y un micro absolutamente genial.
A mi el único bicho que me da repelús es la langosta, no las soporto, me dan auténtica grima. Podría haberlo hecho protagonista de mi relato, pero dado que me tenía que cargar al "ex" le he dado un toque de realidad: si fuera una langosta no podría ni acercarme, jajaja.
EliminarMil besos, Gema, feliz fin de semana
Hola Chari! A mí las cucarachas, del asco que me dan, me causan no miedo: pavor. Y si encima son la reencarnación de un "hijoputa" me parece muy bien que la machacaras al instante. Te aseguro que tú no te reencarnarás en una cucaracha.
ResponderEliminarMuchos besos
Le tenía que haber pasado encima con un bulldozer, jajaja, eso sí sería auténtica justicia poética.
EliminarUn beso enorme, Macarena, gracias por tu comentario
¡Pobre cucaracha! Ella solo quería arreglar las cosas ... Buen micro con un final contundente, espero que tengas suerte con el concurso. ¡Hasta la próxima!
ResponderEliminarAlgunas cucarachas, y otros "bichejos" similares aunque van en dos patas, no merecen segundas oportunidades: zapatazo y a otra cosa, mariposa, jajaja.
EliminarMil besos, Rad
Una historia muy conmovedora para éstas fechas... jajajaja.
ResponderEliminarNoa
¿¿Verdad que sí?? A mi me ha hecho llorar... de risa, mientras escribía. Un beso, Noa, mil gracias por tu visita y por tu comentario
EliminarUn micro precioso ja,ja,ja aunque ami me dan asco las cucarachas, si las pisas hacen un crujido asqueroso. Un abrazo
ResponderEliminarEn esta ocasión, el crujido le ha debido sonar a mi protagonista como música celestial, jajaja.
EliminarUn beso enorme, Mamen, feliz finde de San Valentín
Pobre Marcos! Que seu karma seja outro. Em todo caso, que vivam las cucarachas. Elas devem servir para alguma coisa, coitadas!
ResponderEliminarhttps://www.youtube.com/watch?v=jp9vFhyhNd8
Bom dia, J. Eugenio. Obrigado por seu comentário e a música !!
EliminarNaturalmente, as cucarachas devem servir para algo! (como meu "ex"), jajaja, Elas realmente me inspiraram!!
Mil beijos
Hola. Gracias por tu comentario y por la canción!!
¡Claro que las cucarachas tienen que valer para algo! (Como mi "ex", jajaja) A mi me han servido de inspiración.
Mil besos
Genial! Se lo tenía bien merecido. Por cierto, mándale flores por San Valentín....
ResponderEliminarLas flores se las pondré en la tumba, jajaja. Uy, que morbosa me he puesto, jajaja
EliminarUn beso enorme, Elisenda
Buenísimo, Chari, creo que aqui todos deseamos nuestra propia cucarachita!!
ResponderEliminarEso y un buen zapato, con o sin tacón, para darse un gustillo, jajaja
EliminarMe alegra que te haya gustado, María Eugenia. Mil besos y feliz fin de semana
Una historia idónea, y muy acorde con estas fechas. El final era de esperar, seguramente yo, hubiese hecho lo mismo o incluso con más rabia si cabe.
ResponderEliminarUn corto muy divertido.
Te felicito.
¡¡Me alegra que te haya gustado el micro!! Creo que todos tenemos a alguien ("ex"-novio, amigo, pareja) al que le desearíamos un buen pisotón, jeje. ¿A que sí?
EliminarUn beso enorme, amigo
Gracias por compartir un micro bien ejecutada, que Chari. Supongo que he aprendido algunas cosas de mi madre, una de las cuales es la intolerancia completa para las cucarachas, independientemente de quiénes podrían haber sido en una vida pasada. Si ella había visto uno en nuestra casa se habría quemado el lugar. Aparte de eso, cualquier persona que regresa como una cucaracha hace no sólo porque ese es su karma, pero lo hacen bajo su propio riesgo y peligro! Le deseo el primer premio en el concurso. Tener un fin de semana agradable.
ResponderEliminarThank you for sharing a well-executed micro, Chari. I suppose that I learned a few things from my mother, one of which is complete intolerance for cockroaches, regardless of who they might have been in a past life. If she had seen one in our house she would have burned the place down. Aside from that, anyone who returns as a cockroach does so not only because that is their karma, but they do it at their own risk and peril! I wish you first prize in the contest. Have a pleasant weekend.
A mi no me dan asco, sin embargo, si veo una langosta... uff, tengo que huír. Qué grima. Y tienes razón, volver encarnado en forma de cucaracha se exponen a todo, incluso los pisotones de las "ex", jajaja.
EliminarUn beso enorme, Paula, feliz fin de semana
Menos mal que no soy jurado. Tendría un dilema para votar. Me gusta mucho Chari. Hasta asquito me dio el crach del cucarachon. Jiji.
ResponderEliminarComo le decía a Mamen, en este caso el "Crach" (que también me da asquito) me hubiera sonado a música celestial, jajaja. Pobres cucarachas, no tenía que haberlas insultado de este modo. Haré un post para disculparme, jajaja
EliminarMil besos, Pepa
Chari......es brutal!!!! Es un excelente micro. La comparación con una cuki es sublime :) Un saludo
ResponderEliminar¡¡¡Muchas gracias!!! Me alegra que te haya gustado, pero la verdad es que las pobres, pobres cucarachas no se merecen tanta afrenta, jeje
EliminarUn beso, Ana Lía, gracias por visitar el blog y por tu comentario
Jijiji genial relato. Me has hecho reír.
ResponderEliminarUn besillo.
¡¡Me alegro, María!! Ese era el reto: justicia poética y risas, una combinación estupenda.
EliminarUn beso enorme, y feliz fin de semana de San Valentín
Siempre que veo una cucaracha me la cargo pero ahora que me has abierto los ojos y pienso que puede ser la reencarnación de un ex-novio creo que la próxima que vea me la cargaré con ensañamiento y alevosía.
ResponderEliminarBesos.
Eso, eso, con mucha mala baba... jajaja
EliminarPobres cucarachas. Te aseguro que las que yo he visto a lo largo de mi vida eran mejores que mi "ex", y es que todas las comparaciones son odiosas.
Un beso enorme, Kirke
Divertidisimo, a Cada cerdo le llega su S. Martin y a cada cucaracha su Chari jajajaja. Muy bueno. Besotes.
ResponderEliminar¡¡Me encanta el lema, jajaja!! Pero como digo, las cucarachas SÍ me dan pena... a los "ex", cuanto más se les pise, mejor, jajaja.
EliminarMil besos, Mariola
No hay muchos insectos que me molestan, fuera del tipo morder, como los mosquitos y las moscas, y algunos insectos que escozor, como las abejas avispas. No me importa. Cucarachas no me moleste, como largo no en la casa. He tenido amigos que tenían miedo mortal a las arañas, mi hermana incluido. Pero, para mí, en general, no me molesta a muchos insectos, ni siquiera a las abejas y avispas. Si se posan en mi Tan solo dejo que sean, y que desaparecen después de uno o dos minutos de la exploración. ¿Reencarnación? si tengo una selección de insectos, espero que sea una mariposa más cerca de ser un hada jejeje. Gracias gracias por compartir esta entrada de mi amiga más querida Chari {:o)
ResponderEliminar¡¡Yo también prefiero a la mariposa, por el mismo motivo que tu!! Las grandes mentes piensan igual, jeje.
EliminarMil besos, querida Cindy
Ahora que lo pienso, querida Chari, aunque no creo en esas cosas del karma, a mí me encantaría encontrarme con más de un ex reencarnado en cucaracha para poder aplastarlo sin pena ni asco, ¡ja, ja! Divertido y ocurrente micro: mucha suerte en el concurso ;)!
ResponderEliminarBesos y Feliz San Valentín!
Fer
¿¿A que estaría bien?? Menudo pisotón se hubiera llevado, se habría quedado hecho un sello, jeje.
EliminarUn beso, Fer, me alegra que te haya gustado
Genial, Chari. Por mucho cariño que se les tenga a las cucarachas, hay agravios que hay que vengar y el que se lo merece, se lo merece.
ResponderEliminarUn beso.
Y que lo digas. En realidad, el micro tenía que haber sido al revés, una pobre cucaracha que, por portarse mal, al renacer se reencarna en un Marcos cualquiera, jajaja. Que bien me lo paso, Rosa.
EliminarMil besos, gracias por tu comentario
Acabas de hacer realidad el sueño de muchas. Aplastar al ex como si fuera una cuqui, jjijijii.
EliminarUn besico, Chari.
Es lo que se llama justicia poética, jajaja. Me he divertido escribiéndolo, la imaginación al poder.
EliminarUn beso enorme, Sue
Me ha encantado tu relato Chari Pobrecillo, con lo que cuesta reencarnarse! Un abrazo guapa
ResponderEliminarBueno, que se lo tome con filosofía, la próxima vez le tocará ser algo mejor... como oruga de la col o así, jajaja.
EliminarMil besos, Mercedes
Pues a mí sí me dan asco las cucarachas, y los insectos en general, dependiendo del tamaño, claro. Por lo tanto, si me acecharan o invadieran mi propiedad no dudaría en mandarlos al otro barrio con lo primero que tuviera a mano. Pero no se cómo reaccionaria si el bicho en cuestión se revelara como mi ex y me pidiera sinceramente perdón. Supongo que sería un blandengue.
ResponderEliminarCon esa actitud, la protagonista podría empeorar la situación y la cucaracha aparecer, en su próxima reencarnación, como un lobo, una hiena o algo mucho peor, e ir a por ella a ajustar cuentas, jajaja
Un abrazo.
A mi sólo me dan asco las langostas, si las veo tengo que huir, menuda grima.
EliminarEn cuanto a la protagonista, seguro que esas futuras reencarnaciones del ex se le pasaron por la cabeza, pero su leitmotiv se resume en las últimas palabras del relato: lo que va delante, va delante. Y qué a gusto se quedó con el pisotón, jajaja. Además, si él se reencarnara en hiena, ella lo haría en elefante, para poder seguir chafándole las reencarnaciones, jajaja.
Un beso, Josep
Mejor reencarnación que en una cucaracha no pudo tener ese traidor al amor. Bueno de rata tampoco le hubiera ido mal. ¡Malos bichos! Los ex, quiero decir.
ResponderEliminarBesos
Tienes razón, rata tampoco hubiera ido mal. Pero ¿y perderme el tchac que oiría tras el pisotón? ¡¡Eso nunca!! No todos los ex son malos bichos, el de mi relato, sí, jajaja.
EliminarUn beso enorme, Francisco
a mi las cucharachas no me dan repelus, pero a Sadoc si y tengo que ser yo la encargada de matar a tal bichitos jeje,en fin es toda una aventura.
ResponderEliminarEspero que al aludido le llegue jeje. un beso enorme. TERE.
Lo que yo espero es que el aludido se reencarne de verdad en cucaracha... ¡¡¡venganzaaaa!!! No sabes qué subidón me da al poder tomarme estas cosas con humor, bien sabes lo que me ha costado.
EliminarMil besos a ti y a Sadoc
Joder Chari, me ha encantado XD
ResponderEliminarMe he reído mucho, te lo prometo. Voy a compartirlo en mi caralibro para que lo lea todo el universo jajaja
Aparte, a mí tampoco me dan asco las cuquis, pero no me gustan porque suelen implicar suciedad y ausencia de higiene, ya sabes. Tampoco las mato normalmente ^^
Me alegra mucho haberte hecho reír, Holden, ese era el objetivo. Ese y matar metafóricamente a un "ex" que me incordiaba tanto como una puñetera cuqui, o más porque a mi las cucarachas no me dan la vara.
EliminarUn beso enorme
A mí la cucaracha es como grimilla, pero hay otras cosas que me dan más.
ResponderEliminarQuién sabe... igual sí podría ser alguien reencarnado, nunca se sabe....
Besitos
Que sí, que las cucarachas (o los bichos que más asco dan) son los ex reencarnados. Y con ellos ¡¡¡NO HAY PIEDAD!!!
EliminarMil besos, amiga
Pues yo casi que lo habría dejado vivir para que sufriera un poco más temiendo por su vida constantemente, entre otras cosas. Muy bueno.
ResponderEliminarSaludo.
Ohhhh, qué gran, gran idea... ¡capturarlo y meterlo en una cajita, y que viviera temiendo su suerte!... Pero deja, deja, un buen pisotón y todo queda en el pasado, y a otra cosa, mariposa, jaja.
EliminarUn beso, María Jesús, gracias por venir y por tu comentario.
Qué historia tan divertida y liberadora has escrito, Chari, para este concurso que espero tengas todo el éxito que te mereces, pues siempre te las ingenias para hacernos pasar unos ratos fantásticos llenos de sonrisas, como en este relato, donde los ex disfrazados de cucaracha parece van a ser extinguidos de la tierra a base de buenos pisotones... ¡crack! ¡crack! ¡crack! ja,ja,ja,ja
ResponderEliminarMiles de besos
¡¡Eso es exactamente, Estrella!!: una historia liberadora. Me ha costado mucho pasar página, pero ahora que lo he hecho, al menos me permito divertirme. Ya puedo recordar sin sufrir, y prefiero la compañía de las risas a las lágrimas.
EliminarUn beso enorme, amiga
jajajaja es buenísimo Chari!!!! Venganza, :)
ResponderEliminarEl pobre no tenía suficiente con el karma sino que también tubo que sumar un trágico final a esa experiencia insectil, ;)
Me ha encantado, besitos!!!
Sí, dulce y fría venganza, mmmmm!!! Me alegra que te haya divertido, Irene, mil besos
EliminarPobre bichito, no logro terminar su confesión, lo que habra que esperar es que no se vuelva a reencarnar en abeja jaja.
ResponderEliminarBesos chari
Jajaja, eso no lo había pensado, pero mira, si se reencarna en abeja y pica a la protagonista, casi que le compensaría: ¿sabes que las abejas mueren cuando pican? jajajaja... ¡¡¡sigue saliendo a cuenta!!!
EliminarUn beso enorme, Anto
Jejejeje, qué se fastidie. ;) La cucaracha ya no puede caminar... :P Enhorabuena por el premio, muy merecido, guapa. =)
ResponderEliminarUn besote. =)
Eso, eso... que se jorobe, jajaja. Muchas gracias, Soledad, echo mucho de menos tus pampiroladas.
EliminarUn beso enorme
Un micro estupendo, Chari... Con gran humor y fondo, un pisotón certero, literal y simbólico, a la cucaracha de un ex reencarnado.
ResponderEliminarAbrazo, compi ;)
¡¡Me alegra que te haya gustado, Edgar!! Me dejó TAN a gusto ese pisotón, jejeje.
EliminarUn beso enorme, compañero