Es curioso, ayer
conté la misma anécdota en dos ocasiones y todavía no sé por qué salió el tema.
De hecho, ni siquiera se trata de una “anécdota” al uso, es más bien un
recuerdo que tiene que ver con mi familia (y que también he compartido con
vosotros en una entrada anterior).
Hubo
una época en que a mi padre le dio por hacer “churritos” para desayunar. Se levantaba antes que nadie, preparaba la masa y empezaba
a freírlos y, cuando ya estaban casi a punto, nos despertaba a mi madre y a mí.
Hacía dos bandejas enormes, que nos tomábamos entre los tres (él y yo
acabábamos con casi todos, lo reconozco). A mi padre le gustaban los churros
con sal (están muy buenos, por si no los habéis probado), a mi madre sin nada y
a mí con azúcar. Nos sentábamos a la mesa de la cocina y los disfrutábamos
entre risas. Es curioso, siempre estábamos de buen humor, había un "buen rollo" increíble; quizá por eso los
domingos fuesen mi día favorito de la
semana: churros y sonrisas, una combinación maravillosa.
No
recuerdo el motivo, pero ayer hablé de ello durante la comida que compartí con
mi hermana y mi amiga Teresa (mis dos “Teres”).
Les preparé, además de un pequeño aperitivo, tres cositas que nos
encantan a todas y se me dan muy bien: caldo casero con pelota, escalibada (hice para
un regimiento) y de nuevo la tarta de piña, para que mi amiga la probara. Estaba
todo delicioso, pero lo mejor fue la charla y compartir risas en una genial (y
dulce) sobremesa.
Pasamos
la tarde juntas y luego preparamos una cena improvisada, que compartimos con el
novio de mi amiga. Entonces fue cuando volví a evocar el recuerdo y, de nuevo, no
sabría decir el porqué. Fue una cena estupenda y lo mejor, desde luego, la
compañía.
Pensándolo
bien, puede que me vinieran esas imágenes a la memoria porque me
encontraba rodeada de algunas de las personas más importantes de mi vida, en un
ambiente relajado, alegre y lleno de cariño. Quizá por eso evoqué los instantes
compartidos con mis padres, tan llenos de amor. Lo que sé con seguridad es que
fueron esos momentos tan agradables los que hicieron que me acostara con una
sonrisa, una sonrisa que, esta mañana, aún permanece en mi rostro, iluminando mi mañana.
Hola!!!!
ResponderEliminarMe ha encantado tu recuerdo. A mí me encantan los domingos porque tengo muchos recuerdos variados. Cuando era pequeña los domingos de verano los pasaba en la finca familiar(excepto alguno en el que hacíamos excursiones) y comíamos bajo los manzanos, estaban mis padres, abuelos, mi hermana, mi tíó, mis tíos abuelos, era genial. Y los de invierno mis padres los hacían especiales, siempre tenían algún plan para sorprenderme, a veces nos llevaban a una villa marinera muy bonita a pasear y a comer sardinas, otros íbamos a un parque que es reserva de aves a observarlos y pasarlo bien, otra vez, cuando las termas romanas no estaban restauradas y no se podían ver ellos se las arreglaron para contratar a una guía y pudimos visitarlas...
Y con mis hijos intentamos siempre hacer planes originales y por la tarde, a veces, preparábamos con ellos rosquillas de anís, generalmente eso lo hace mi marido, y las merendábamos viendo una peli chula.
Un besito, me ha encantado la historia y yo creo que la has recordado por la maravillosa compañía que tuviste ayer.
Este recuerdo no es de mi niñez, de ella tengo muchos fantásticos. Es de cuando se casaron mis hermanos y mis padres y yo nos quedamos con la casa para nosotros solos (es un decir, porque SIEMPRE había alguien con nosotros). Fue una época muy bonita, con una magia especial porque había muy buen rollo en casa, y creo que ayer estar tan bien acompañada me lo recordó.
EliminarUn beso enorme, Gema, me ha encantado conocer cosas sobre tu infancia.
Eso, querida Chari, es una de las muchas evocaciones que todos tenemos alguna vez cuando nuestra mente asocia un lugar con unos hechos o, como en tu caso, una situación con otra parecida que aconteció muchos años atrás. A veces, un olor te recuerda una experiencia o un lugar, y no digamos de la música. Una canción te puede trasladar a un momento triste o feliz de tu adolescencia o niñez. Nuestro cerebro guarda celosamente todas nuestras vivencia y las saca a la luz cuando algo enciende el interruptor de nuestra memoria.
ResponderEliminarUn abrazo.
A mi me pasa mucho con las canciones, y una vez, me pasó con un olor. Fue en un supermercado, olí un aceite bronceador y, por un instante, fui una niña que jugaba con sus primos en la playa. Fue una sensación increíble, la más fuerte que he tenido jamás. ¡¡Qué cosas tan curiosas guarda nuestro cerebro!!
EliminarUn beso enorme, Josep, feliz fin de semana
Doce son los músculos que necesitamos para ejercitar la sonrisa, con lo cual es una gimnasia beneficiosa para nuestro estado de ánimo y bienestar. Por demás es contagiosa y se puede compartir y por si esto fuera poco y como decían los escoceses: Una sonrisa ilumina más que una bombilla y encima es energía más barata.
ResponderEliminarChari, por tanto mi deseo es que esa felicidad te ilumine recordando a los seres queridos y disfrutando de los que tienes bien cerca. Acabo de conocer a Tere tu amiga y su blog. Ya sabes lo que dicen: Los amigos de mis amigos, mis amigos son. Y Tere es el nombre de mi pareja también. Bonito nombre
Besos suficientes para el fin de semana.
Qué bonito comentario, Francisco, gracias. Me encanta ese dicho escocés, es precioso. Me alegra que hayas visitado el blog de mi amiga, eres muy amable. Y el nombre de Tere me encanta, todas las personas que conozco y lo llevan me caen genial, y son cinco... bueno, seis contando a tu pareja. Mil besos para ambos y que tengáis un genial fin de semana.
EliminarYo también estoy esta mañana con una sonrisa de oreja a oreja,fue un muy buen día y sin duda, daría lo que fuera por repetir un día como el de ayer, tanto que he dormido de maravilla. VIVA LA AMISTAD. una vez más gracias por ser una excelente anfitriona. un beso enorme y me alegra enormemente contar con tu gran amistad. TERE.
ResponderEliminar¡¡¡Por supuesto que lo repetiremos!!! Y, además, también me invitó tu novio (no pongo su nombre por si no le hace gracia) así que habrá buenos momentos seguro. Gracias a ti por tu cariño sincero, me alegra la vida. Un beso enorme
EliminarNo todo es cuestión de dinero. Saludos para todos y un beso para ti.
ResponderEliminarQué va, el dinero viene bien pero si tienes con quién compartirlo. Si tienes buenos amigos, eres rico.
EliminarUn beso enorme, José
Con qué poco (o mucho, pero sencillo) se puede ser feliz. Mi madre antes hacía churros (ahora sería incapaz de mover la masa) y siempre la recuerdo diciendo que la masa de los churros "tiene que "estar salada como perros" porque si no, quedan sosos tras freírlos.
ResponderEliminarAhora, algún fin de semana, los compramos en una churrería ambulante que ponen en un pueblo cercano al nuestro y que los hace muy buenos (el chocolate no se lo dejo hacer a nadie). Yo los suelo tomar sin nada. Mi marido les pone azúcar. La próxima vez les pondré algo de sal.
Un beso y buen finde.
Es verdad que con poquito se puede ser muy feliz. No sabes cómo me alegra todavía el recuerdo de aquellas mañanas de domingo, era muy dichosa más que nada por la compañía... aunque los churros también ayudaban :) ¡¡¡Estaban tan ricos!!!
EliminarAyer también disfruté mucho, y el motivo es el mismo, estar con gente querida.
Un beso enorme, Rosa, feliz fin de semana
Qué bonito Chari... Creo que es incontrolable a veces contar lo que nos marca varias veces, más aún cuando son recuerdos tan bonitos. Recordar, rememorar, sonreír y compartir, qué buen plan. Comida (ufff qué bueno el caldo con pelota... cuando estuve viviendo en Alicante lo probé por primera vez, y qué buenooooo), compañía, cena... Qué bonito, y que no se pierdan esos ratitos.
ResponderEliminarBEsotes
Espero que no se pierdan, son momentos que enriquecen la vida. La compañía, lo mejor, aunque reconozco que todo estaba riquísimo y eso siempre anima :)
EliminarMil besos, que tengas un genial fin de semana
hola, eses recuerdos son los que valen la pena, los que de vez en cuando te traen esa sonrisa en el rostro ;)
ResponderEliminarEs verdad, y no porque pasara algo concreto, no son "anécdotas" en sí, lo que perdura es la sensación de cariño, complicidad y buen rollo. Y eso vale la pena.
EliminarUn beso enorme, feliz finde
Eso es lo importante, Chari, que la sonrisa siga sea por el recuerdo que sea. Es curioso porque a mí también me vienen ese tipo de sonrisas gracias a determinados momentos, y luego a lo mejor al día siguiente sigue ahí como si nada.
ResponderEliminarUn placer haber leído esta entrada, me has sacado una sonrisa :D
Saludos.
Me alegra haberte sacado una sonrisa, Ross, me gusta compartir la que llevo yo puesta todo el día desde ayer. Un beso enorme, amiga, feliz sábado
EliminarPrecioso el recuerdo chari por cierto el puchero con pelota ohhhhh buenísimo me encanta jajajaja un abrazo y felicidades
ResponderEliminarEsos recuerdos son los que marcan, hace mucho de eso y aún lo siento como si fuera ahora. Y el caldo estaba de muerte, Pedro.
EliminarMuchas gracias por tu comentario. Mil besos
Genial anécdota, seguro que te salió al estar rodeada de gente a la que quieres, y eso te recuerda a momentos parecidos.
ResponderEliminarMe ha encantado.
Un besillo.
Seguro que será por eso, no tiene más explicación. Y es que el ambiente ayer no pudo ser más agradable. Es un gusto compartir con gente querida días así, y también con vosotros, aunque sea a través de mis letras.
EliminarUn beso enorme, María, feliz fin de semana
No hay nada mejor que compartir con los seres queridos y en un ambiente relajado nuestros recuerdos. Feliz sonrisa.��������
ResponderEliminarEsos momentos son los que producen sonrisas duraderas, están basados en emociones fuertes, en compartir cariño.
EliminarGracias por tu comentario, Victoria, un beso enorme
Good Saturday to you, Dear Chari! Thank you for sharing your good times with us! In my home, when I was young, I was close to my father. He loved to make fried eggs in a small iron skillet. One of my favorite things was to share a plate of fried eggs and very dark rye bread with him. I would prepare the coffee and somehow he would get six or eight eggs into that little pan and cook them in butter. He always made them correctly, not underdone and never overdone. We would sit together and share our meal and to me that made that day special for me. Thank you for bringing that memory back for me. Many kisses and a lovely weekend to you, Dear Friend!
ResponderEliminar¡¡¡Qué precioso recuerdo, Paula!!! Cómo me alegra habértelo traído a la memoria y que lo compartas conmigo. Estos momentos son los que nos alegran cuando aparecen en nuestra mente, los que nos ayudan incluso a superar malos momentos. Me alegra que tuvieras una relación tan bonita con tu padre, Paula.
EliminarUn beso enorme, querida amiga
Hermosos recuerdos, tengo muchos de ellos cuando yo era un niño con la familia. Los días de campo, paseos en barco, o simplemente a caballo por el campo el domingo. Incluso la iglesia fue divertido porque significaba un gran desayuno en familia en el restaurante local después de la iglesia. Todo lo que podía comer tortitas yo lo amaba ellos. Amor Los picnics, eran geniales para porque eran una reunión de amigos cuando alguien traería una guitarra y luego cantando y bailando. Y, por supuesto, mi mamá y yo estábamos cerca también, y nos encantó a payasadas en el baile de simulación. Muchas gracias por los maravillosos recuerdos querida amiga Chari
ResponderEliminarTambién tus recuerdos son preciosos, Cindy. Estoy encantada de que mi post haya servido para traeros a la memoria a todos los que comentáis cosas tan bonitas, tan importantes, tan mágicas.
EliminarMe alegra de corazón haber compartido mi sonrisa de hoy. Un beso enorme, querida amiga.
andar por la vida con una sonrisa y qye tu alrededor ande la gente contenta es muy gratificante. Un abrazo
ResponderEliminarEs cierto, Mamen, es de las mejores cosas que te pueden pasar. Mil gracias por tu visita. Besos y que tengas un genial fin de semana
EliminarTrabajando por la mañana y por la tarde si hace bueno un paseo por la playa . Besos
EliminarEste tipo de posts me encantan, Chari. Me he sentido muy identificada contigo, con ese valor que das a la amistad y a los buenos momentos con amigos. Cierto es que evocar momentos pasados nos llena de nostalgia, y más tratándose de los padres, pero si el presente nos dibuja esa sonrisa que dices, además de con familiares con amigos, la vida es una fiesta.
ResponderEliminarMe he asomado a visitarte y a desearte un buen finde, a ti y a Tere, a quien visitaré en breve porque ya ví que se hizo seguidora de mi blog (¡muchas gracias!).
Y ya te vale, me dejaste con ganas de comer churros, son mi debilidad.
¡Un fuerte beso!
Me alegra que te haya gustado la entrada, Chelo. Estos momentos los evoco con cierta nostalgia, pero con mayor dosis de alegría que de tristeza. Son recuerdos que me dejan una sensación de paz. Y cuando descubro que puedo revivir esa sensación con la gente que me rodea en la actualidad, me emociono.
EliminarGracias por tu visita, y por visitar a mi amiga.
Mil besos, Chelo
Aférrate a esos recuerdos con fuerza Chari. Al final, es lo único que nos queda. Una entrada muy emotiva, felicidades.
ResponderEliminarMuchas gracias, Carlos, por tu visita y por tu comentario. Sí que son importantes estos recuerdos, son los que nos dan fuerza para seguir caminando.
EliminarUn beso enorme
Qué disfrutona eres, Chari, y te lo digo con todo el cariño. Creo que eres de esas personas que sabe apreciar los detalles pequeños de la vida, que sabe sacarle el jugo a todos los momentos y que además tiene una memoria increíble para revivirlos cada poco. A tí no te hacen falta ni la lotería ni que sea un día grande en el calendario: tú tienes la suerte de saber VIVIR (con mayúsculas).
ResponderEliminarMe alegro de tu sonrisa, que como siempre has sabido transmitirnos, y del estupendo día que compartiste ayer. Ojalá que haya muchos más :))
Una montaña de besos para tí y feliz noche de sábado!!
Me ha costado muchos años aprender a disfrutar de estas cosas pequeñas y no centrarme en lo negativo, por eso cuando me decís que soy positiva me alegro tanto, porque se nota que el esfuerzo ha valido la pena.
EliminarMe alegra haber podido transmitirte algo de mi alegría de ayer.
Un beso enorme, Julia
Qué gusto da leerte, Chary. Me dejas con una gran sonrisa y un sentir dulce. Un abrazote :)
ResponderEliminarMe alegra haberte transmitido algo dulce y un poquito de alegría, Elena. Qué bien que te guste lo que escribo, me hace mucha ilusión.
EliminarMil besos
"Quizá por eso evoqué los instantes compartidos con mis padres, tan llenos de amor".
ResponderEliminarBellos recuerdos, donde el amor y la ternura q hubo, sigue emanando en tus letras.
Esa sonrisa siempre te acompañará Chari( y lo sabes) y me alegro mucho, pues esos son los q dan fuerzas continuar el camino.
Gracias por compartirlos.
Te sonrío conn el Alma.
Yo también creo que esos recuerdos son los que muchas veces nos ayudan y acompañan a lo largo del camino, nos dan fuerzas y nos motivan a seguir adelante. Me alegro de corazón si he podido compartir esa alegría y recuerdos con vosotros.
EliminarUn beso enorme
Bonitos momentos. Gracias por redistribuir tu sonrisa. Buena entrada.
ResponderEliminarMe alegra haber podido compartirlos con vosotros, un beso enorme, Pepa
EliminarLlevas la alegría en cada palabra que escribes Chari, y se te da muy bien transmitirla, me haces pasar buenos momentos risueños, y la risa ya se sabe, es saludable. Creo que eres de las personas que sabe disfrutar de la vida y las amistades, e incluso disfrutar con los recuerdos buenos.
ResponderEliminarMe alegro que te lo pasaras genial y compartieras ese valioso tiempo con dos seres queridos. ¡Los churros! jajaja yo también tengo parecidos recuerdos, que buenos estaban.
Un beso enorme Chari.
Me encanta comprobar que la alegría os llega de verdad, qué gusto. Fue un buen día para mí y cuando veo que os gusta lo que escribo... me emociono. Gracias, Mila, por tus siempre cariñosos comentarios.
EliminarUn beso enorme
Si es que eres para comerte a besos!!!!! Pues eso es Chari, que los mejores momentos de la vida son los más sencillos, los que disfrutamos con los nuestros, los que no requieren más que de unos churros y un café. Me alegra verte feliz. Un besazo.
ResponderEliminarEs verdad que hace falta muy poquito para ser feliz si estás en buena compañía, la vuestra, aunque virtual, me hace muy, muy dichosa. Muchas gracias por estar en mi mundo, Macarena. Eres un cielo.
EliminarMil besos
¡Jo! ¡Qué recuerdos! Mi padre y mi tío también solían levantarse pronto para hacernos churros a los niños de la familia cuando vivíamos todos juntos en la misma casa. Son detalles que no se olvida, ¿verdad? Era mejor empezar el día abriéndo perezosamente los ojos y oliéndo con fuerza: si olía a churro era momento de levantarse, ¡podías quedarte sin ellos por remolón!
ResponderEliminarA mi me los hacían de más mayorcita, jajaja, pero estaban igual de ricos. Fueron momentos geniales, me alegra haberos traído recuerdos bonitos también a vosotros, Holden.
EliminarUn beso enorme
Tengo una amiga a la que los domingos no le gustan. Desde niña siempre le han parecido días tristes.
Eliminar¿Churros con sal? No lo había oído nunca. Tendré que probarlos.
Un besito, Chari.
Yo también conozco gente que detesta los domingos, pero porque tienen que volver al trabajo :)
EliminarLos churros con sal están buenos, pero a mi me encantan con mucho azúcar, para eso soy muy golosa.
Un beso enorme, Sue
Pues ojalá sea eso, pero me encantaría que los actores se quedaran para seguir compartiendo alegrías.
ResponderEliminarUn beso enorme, Julio David
Te contare algo, yo soy hijo único y mis recuerdos mas felices de mi infancia, son los que vivimos los tres juntos, esos dias en los que pasábamos charlando amena mente y que crearon en mi ese amor por la familia que hoy en día le doy a mi propia familia, creo que el mayor regalo para los hijos es el tiempo dedicado y eso al igual que a ti, me dibuja una Sonrisa en mi rostro.
ResponderEliminarun beso y un fuerte abrazo
Yo tengo dos hermanos y una hermana, y recuerdos muy dichosos de mi niñez. Cuando mis hermanos se casaron y se fueron de casa, yo me quedé con mis padres. Y fue una temporada muy, muy bonita también, había una relación muy especial y tuvimos los tres momentos geniales que atesoro.
EliminarUn beso enorme, Anto