Hace días que escribí esta entrada, pero no me decidía a colgarla. El motivo os lo explico en los dos primeros párrafos y en el siguiente, os cuento el porqué de mi decisión de hoy.
Escribir mi blog me da la oportunidad de crear un universo propio, un mundo más o menos ideal (relajado, pacífico, divertido, amable), un lugar en el que mostrar quién y cómo soy y en el que no suele haber cabida para el lado oscuro que muchas veces nos muestra la vida. Parece una elección algo simplista y puede que lo sea, pero no creo que tenga nada de malo. Es una opción que me hace feliz y eso me basta.
Escribir mi blog me da la oportunidad de crear un universo propio, un mundo más o menos ideal (relajado, pacífico, divertido, amable), un lugar en el que mostrar quién y cómo soy y en el que no suele haber cabida para el lado oscuro que muchas veces nos muestra la vida. Parece una elección algo simplista y puede que lo sea, pero no creo que tenga nada de malo. Es una opción que me hace feliz y eso me basta.
Cuando alguna
vez hago una crítica suele ser desde el humor. En parte porque riéndote de
aquello que más te afecta lo desmitificas y parece que duele menos; en parte
porque, dejando de lado algún desengaño amoroso, no he tratado de temas
“serios” en mis entradas.
Sin embargo,
no siempre se pueden enfocar los sucesos desde el prisma de provocar sonrisas.
Hay ocasiones en que mostrar la “fealdad de la vida” (como se ha hecho en las
manifestaciones que se han realizado por todo el país y en los artículos de
compañeros blogueros cuyos post compartí la semana pasada) es el único medio
que tenemos para combatirla.
Esa fealdad se
pone de manifiesto en la actuación cobarde y miserable de cinco personas que
deciden forzar a otra, y se manifiesta en la conducta –igualmente execrable- de aquellos que defienden dicho comportamiento y lo catalogan de
“diversión consentida”.
Esa “manada”,
la que está compuesta por individuos que no ven más allá de la satisfacción de
sus deseos más básicos a costa de la humillación y la violencia, esa “manada”,
decía, cuenta como miembros honoríficos a
aquellos que con su opinión (esté basada en un “supuesto” conocimiento jurídico o
no) refrendan una actuación vergonzosa que yo sólo sé calificar de crimen. Y
puede que estas personas no hayan participado activamente en los sucesos, pero para mí al
no desaprobarlos se han convertido en miembros del grupo.
Me parece
aberrante que no se comprenda que el silencio o la ausencia de un “NO” (qué
respuesta puede esperarse de alguien que está aterrorizado, o ebrio, o
inconsciente) no significa “SI”. Resulta patético que se tienda a juzgar
a la víctima en lugar de al agresor y que, en general, se trate de buscar los “trapos sucios”
de ésta para defender a los que realmente han cometido el delito. Haríamos bien
en modificar esa faceta de la actuación de los que pretenden llevar la justicia
a los tribunales y defender los derechos de los ciudadanos.
Yo no soy
jurista, ni abogado, ni se mucho de leyes. Pero sé que el castigo tiene que
estar a la altura del delito y no creo que en este caso haya sucedido así.
Sé que cuando
las leyes no funcionan hay que cambiarlas, sin que ello suponga un demérito
para nuestro sistema jurídico. No creo que callar y consentir sea la mejor
opción. No soy partidaria de linchamientos, soy partidaria de una justicia
honesta y coherente.
Y sobre todo sé
que el silencio no es consentimiento tácito ni expreso y que cuando alguien – sea hombre o mujer – dice “no”, quiere decir NO.
A ver si va calando el mensaje.
Qué parte del "no" no entendiste... en Buscando mi Equilibrio .. de Esthertxu
La manada... en Incoherencias sin más ... de Miriam Escritora
Impotencias... en Las letras del Gilo ... de Gildardo López Reyes
Callar no es la respuesta... en Enredando con las letras ... de Conxita Casamitjana
Y lo peor de todo es que no es algo nuevo. Hace ya demasiado tiempo que conductas execrables como esta reciben castigos "simbólicos" con argumentos machistas generalmente basados en la falta de resistencia o de oposición insuficiente por parte de la víctima. Y peor aun es que hayan voces que defiendan a esos asquerosos agresores. Y seguramente no hay más porque la presión mediática los coarta. Después de tantos años luchando contra los abusos sexuales y la violencia de género y parece que seguimos igual.
ResponderEliminarPor mucho que se endurezcan las penas, mientras hayan jueces que interpreten la ley a su manera y no se refuerce la educación en las escuelas, no lograremos avanzar.
Un abrazo.
Es cierto que no es nuevo. Que sigamos la misma tónica y no avancemos me parece deplorable. Y cuando esto se ve tan claro en la conducta de los que imponen la justicia... qué lástima.
EliminarGracias por tu comentario, Josep
Partiendo de la base de que éste es tu blog, un pedacito de tí misma que debe reflejarte en realidades o en anhelos, creo firmemente de que cabe cualquer cosa que a tí te apetezca comentar o exponer. Si no siempre es amable o divertido tu texto, pues perfecto también :)
ResponderEliminarA lo demás, no puedo añadir nada porque estoy totalmente de acuerdo contigo. Pienso que en muchos aspectos vamos retrocediendo como sociedad en lugar de avanzar. ¿Cuántos casos más de violaciones en grupo han salido en los telediarios estos últimos días? ¿Qué demonios les pasa a los hombres, a los jóvenes o incluso a los niños (también ha habido un caso de violación infantil entre compañeros)? Estamos perdiendo los valores, embruteciéndonos en aras de una supuesta libertad y concepto de la diversión, cosificando a los seres humanos con los que somos incapaces de empatizar. ¡Es sencillamente terrible! Y sí, la ley respecto al tema de las agresiones sexuales tiene que actualizarse y endurecer sus supuestos y castigos, al igual que en muchas otras realidades sociales en las que está completamente obsoleta o resulta del todo injusta.
Un beso Chari, es un placer visitarte escribas sobre lo que escribas.
Es verdad que me gusta menos escribir sobre cosas así, pero después de leer las noticias estaba rabiosa, y nerviosa, y triste, y dolida porque no avanzamos.
EliminarMe alegra que te guste lo que escribo, Julia.
Mil besos
A veces he pensado yo también hacer alguna entrada de este estilo dando mi opinión sobre diferentes temas, pero nunca termino de decidirme. Creo que por mis comentarios de libros, se ve claramente como pienso de casi todo y prefiero seguir así, hasta que me de la ventolera y rompa con la pana.
ResponderEliminarMe parece perfecta tu reflexión con la que no necesito decir que estoy totalmente de acuerdo.
Hay mucho machismo, aunque nos creamos modernos y pensemos que lo hemos superado casi todo. Rascas la superficie y esta sociedad está aún muy tarada por la religión, la moralina y los prejuicios.
Un beso.
A mi también me costó decidirme, pero en esta ocasión no he querido dejarlo pasar. Es mi forma de expresar lo que siento, que en este caso es mucha indignación.
EliminarMil besos, Rosa
Nos queda mucho por avanzar todavía para que esta sociedad sea una sociedad justa y que defienda a la victima mas que a los delincuentes, y que efectivamente deje de ser una sociedad machista que es lo qwue parece con esta y otras sentencias e actitudes, queda mucho trabajo por conseguir para que realmente cambien las cosas, pero mientras nos encontramos actitudes donde se defiende mas al delincuente que a la victima no adelantaremos jamas.
ResponderEliminarY desd eluego lo que no hay derecho es que se eche mas leña al fuego que bastante tiene la pobre chica como para que encima venga otros a meter mas caña y deja desemparada a la pobre victima que bastante a sufrido ya con estos cinco desalmados por no decir otra cosa, que calificativos y a cual mas fuertes no me faltan. Ojalá algún día esta sociedad sea justa e igualatoría mientras tanto no nos callaremos y protestaremos contra estas y otras actitudes injustas.
Un beso enorme.
Ojalá sea como dices, Tere, y esta sociedad cambie... pero no creo que vivamos para verlo. Es así a nivel mundial. Y me parece muy triste.
EliminarUn beso enorme
Hola Chari
ResponderEliminarEncuentro muy acertada tu reflexión y ese mensaje debe ir calando, es repetir hasta la saciedad y seguir aún más insistiendo en el NO es NO y también que un SILENCIO NO es un SI. Creo que es necesario trabajar mucho más con los niños, con los adolescentes e intentar atajar este tipo de comportamientos y por supuesto no ser tan permisivos con la violencia y las agresiones. Me parece indigno que se hagan sentencias como las del caso que expones y los juicios paralelos que se le han hecho a la víctima, hasta el punto de publicar sus datos personales. ¿Pero cuánto más daño quieren hacerle a esta mujer? Ya basta y no les pasa nada. Es muy indigno y yo soy de la opinión que las letras sienten, porque los que las escribimos sentimos y a veces necesitamos alzar la voz y decir que no queremos este tipo de sociedad, que ya basta.
Muchas gracias por la reflexión y también por esa referencia a mis letras.
Un beso
Si ese mensaje se respetara, no habría tanto problema. Es horrible lo que le están haciendo, lo de sus datos personales ya es el colmo, como si no hubiera tenido ya bastante humillación.
EliminarMe gustó mucho tanto tu relato sobre la violencia de género como lo que decías después sobre este tema en los comentarios. El ejemplo de valientes como tu me motivó a escribir este post.
Un beso enorme, Conxita
Es un relato muy acertado y es una buena lección de saber que es violencia o sexualidad, no es un no. Como se soluciona un problema que lleva mucho tiempo sin resolver y seguirá. Yo pienso que con la educación desde las colegios y las familias. Yo tampoco soy , ni abogado, ni juez , nu jurista, pero en materia de leyes esta está muy mal planteada. Si no cambian las leyes difícil es ser justos. Da pie a que se sigan haciendo fechorías y los culpables sales ganando. Un abrazo.
ResponderEliminarEn las familias empieza la educación en el respeto, pero si no cambiamos también la ley, todo va a seguir igual. Hay personas inmunes al dolor de los demás, al respeto. Si no reciben el castigo acorde a su delito, siempre volverán a lo mismo.
EliminarUn beso, Mari Carmen
Hola Chari,
ResponderEliminarConsidero de importancia el enfoque que le quieres dar a tu blog porque creo que todos los que hemos decidido crear uno, terminamos volcando en él nuestros propios, sueños e ilusiones, nuestras vivencias y, en definitiva, el blog termina convirtiéndose el algo parecido a lo onírico y un poco irreal, un desdoblamiento de nuestro yo cotidiano. Y quizá por eso me gusta tanto el tuyo. En realidad, a mí me encanta comenzar las mañanas contigo y, tanto ayer como hoy, por ejemplo, que han sido días de mucho trabajo y no he podido leerte a primera hora, te echo de menos hasta que doy con tu entrada y la leo.
En segundo lugar, ¿qué quieres que te diga? Pues un poco más de lo que hablamos con respecto a la borrachera de la chica que llamó a tu casa. Yo tengo una hija que, por edad, en breve tendrá que salir sin nosotros y me da auténtico pavor. En realidad, lo que desearía es que esto no ocurriera jamás; pero de pasar, que caiga sobre los culpables todo el peso de la ley. Y, junto a esto y aunque no sea el tema, desearía también un cambio en la Ley del Menor porque también estamos asistiendo a auténticas barbaridades cometidas por menores que no tienen ningún tipo de consecuencias penales y, si las tienen, son mínimas.
Así que aplaudo tu reflexión de hoy.
Un besote
Qué bonito lo que me dices, Macarena. Me alegra que te guste empezar el día leyendo mi blog!!
EliminarA mi también me da miedo lo que le espera a mis sobrinas, espero que algún día la ley cambie y las mujeres estén más protegidas. En cuanto a la ley del Menor, estoy totalmente de acuerdo contigo.
Un beso enorme, Macarena
Yo también creo que el humor es una buena herramienta para combatir esa fealdad de la que hablas, pero con algunas cosas no se puede bromear, hay que mostrarlas tal como son porque no hay risa ni chiste en ellas.
ResponderEliminarEsa sentencia es un oprobio para todas las personas cabales y con un mínimo de sentido común (mujeres y hombres). Yo siempre fui muy combativa socialmente, pero hace años que me retiré de las manifestaciones en la calle (tan solo alguna asistencia a las movilizaciones cuando en Madrid estuvieron privatizando la sanidad pública). Pero el día que se conoció esa maldita sentencia, espontáneamente y con la indignación a flor de piel, me fui con mi hija a protestar frente al Ministerio de Justicia.
Creo que cualquiera con un mínimo de decencia comparte tus reflexiones. Solo un Sí es Sí, y todo lo demás son especulaciones que solo benefician a los que les gusta el abuso y practicar la intimidación.
Desde aquí mi aplauso a esta publicación.
Un beso grande.
Es verdad, hay cosas con las que no se puede bromear. Normalmente no me suelo meter en estos temas, pero leer lo que leí me revolvió las entrañas. Me alegra que os haya gustado conocer mi opinión.
EliminarMil besos, Kirke
Blaming the victim is not confined to any one nation or region of the world. It happens in Canada when the judge puts the victim on trial instead of the miscreant. We have had judges resign over their own misconduct during trials involving sexual assault but the network of "boys will be boys" persists here.
ResponderEliminar*****No MEANS NO and SILENCE IS NOT A TACIT YES!****
Qué pena, verdad Paula, que esto sea tan común. Cómo hacer para que cambie se me antoja misión imposible...
EliminarMil gracias por tu comentario y por compartir siempre mis post. Un beso enorme
me gusta lo que has escrito
ResponderEliminarme gusta tu personalidad y lo que expresas desde adentro de vos misma
es maravilloso
Uf, pues en este post me pillaste muy nerviosa y disgustada, no suelo entrar en polémicas, pero esta vez no pude evitarlo.
EliminarMe alegra que te guste lo que escribo.
Un beso, Mucha